La energía solar no es solo una fuente de electricidad, también puede ser la clave para hacer tu negocio más ecológico y rentable. Ahora, la pregunta es: ¿cómo podemos manejar la intermitencia de la producción solar? La respuesta está en el almacenamiento.
En este artículo, vamos a ver cómo esta solución innovadora puede cambiar la gestión de la energía solar. Te explicaremos cómo puedes aprovechar al máximo el poder del sol para mejorar tu negocio en España.
¿Qué es el almacenamiento de energía solar?
El almacenamiento de energía solar, como su propio nombre sugiere, es el proceso de guardar la electricidad generada por los paneles solares fotovoltaicos en una batería para usarla más adelante.
Este método es una solución inteligente y eficiente para contrarrestar la naturaleza intermitente de la luz solar. La producción de energía solar depende de la cantidad de radiación solar recibida. Cuando la radiación es baja, la producción de energía también lo es. En cambio, cuando la radiación solar es alta, la producción alcanza su punto máximo.
Almacenar la electricidad verde que uno mismo produce permite equilibrar esta variabilidad. Además, se reduce la dependencia de la red eléctrica, lo que contribuye a una mayor autonomía energética. En España, esta tecnología puede ser especialmente útil para aprovechar los días soleados y asegurar un suministro constante de energía limpia.
¿Cómo funciona el almacenamiento de energía solar?
Si estás pensando en instalar una planta de energía solar en tu casa y eres el propietario, tienes dos opciones principales:
- Venta total de la electricidad producida si decides vender toda la electricidad que produces, firmarás un contrato con un proveedor de electricidad que comprará cada kilovatio-hora (kWh) que inyectes en la red a una tarifa regulada. Este contrato te asegura una fuente de ingresos regular y segura.
- Autoconsumo: si optas por el autoconsumo, podrás usar directamente la electricidad que generes siempre que producción y consumo coincidan. En este caso, puedes:
- Vender el excedente de producción a un precio regulado (aunque más bajo que el de la venta total) y comprar la electricidad que te falte a un proveedor.
- Almacenar electricidad: cuando produces más electricidad solar de la que consumes, el exceso puede enviarse a una batería que se carga gradualmente.
El almacenamiento de energía solar funciona así:
- Producción de electricidad: los paneles solares fotovoltaicos captan la luz solar y la convierten en corriente eléctrica continua. Esta corriente se envía a un inversor que la transforma en corriente alterna, compatible con la red eléctrica pública o con tus aparatos eléctricos.
- Carga de la batería: si en algún momento creas más electricidad de la que consumes o la red necesita, el excedente se envía a la batería solar, que se va cargando poco a poco.
- Descarga de la batería: cuando produces menos electricidad de la que consumes o la red necesita más de lo que generas, la batería solar se descarga para proporcionar la electricidad que necesitas.
- Inyección a la red: si produces más electricidad de la que consumes y la batería está llena, el exceso se inyecta a la red eléctrica pública.
Es importante saber que un regulador controla los niveles de carga y descarga de la batería para evitar dañarla y prolongar su vida útil.

¿Cómo elegir baterías para placas solares?
Si tu objetivo es producir energía solar y guardarla para cuando necesites esa energía, lo mejor que puedes hacer es adquirir las mejores baterías para placas solares. Una buena decisión no solo te ayudará a tener energía en los momentos de baja o nula producción, también te garantizará una buena eficiencia y vida útil.
A la hora de comprar baterías para placas solares te recomiendo visitar el catálogo de CuencaSolar. En el mismo encontrarás una amplia variedad de baterías entre las que elegir. Dependiendo de la producción tendrás que adquirir baterías con más o menos capacidad de guardado de energía. Lo que está claro es que en la tienda especializada encontrarás baterías que te darán muy buenos resultados, como las baterías de litio Pylontech entre otras muchas. Y si tienes dudas, ello te ayudará a elegir la mejor opción para tus intereses.
Para elegir las baterías adecuadas para tu sistema de energía solar, considera los siguientes aspectos clave:
- Tipo de batería: las de iones de litio son más eficientes y duraderas que las de plomo-ácido.
- Profundidad de descarga (DoD): una mayor DoD permite utilizar más capacidad de la batería sin dañarla.
- Ciclo de vida: opta por baterías con un alto número de ciclos de carga y descarga para mayor durabilidad.
- Capacidad y tamaño: asegúrate de que la batería cubra tu consumo energético diario y se ajuste al espacio disponible.
- Eficiencia: busca baterías de alta eficiencia para aprovechar mejor la energía generada.
- Coste: considera tanto el coste inicial como los costes a largo plazo y de mantenimiento.
- Compatibilidad: asegúrate de que la batería sea compatible con tu sistema y el inversor.
- Condiciones climáticas: elige baterías adecuadas para el clima de tu área.
- Garantía: verifica las garantías ofrecidas por los fabricantes.
- Seguridad: revisa las características de seguridad como protección contra sobrecarga y sobrecalentamiento.
Aplicaciones y beneficios del almacenamiento de energía solar
El almacenamiento de energía solar en España ofrece dos ventajas principales: optimizar la gestión energética local y estabilizar la red eléctrica. Para la gestión energética, permite a los propietarios de sistemas fotovoltaicos asegurar su suministro eléctrico durante caídas de producción o cortes, gestionar su mix energético aumentando el consumo de energía verde, y ahorrar en costos al usar electricidad almacenada durante las horas pico.
En cuanto a la estabilidad de la red, el almacenamiento suaviza las variaciones en la producción solar debidas al clima y ayuda a mantener el equilibrio entre producción y consumo eléctrico. Las baterías regulan la frecuencia de la red, absorbiendo el exceso de electricidad en picos de producción e inyectándola cuando la demanda es alta. Además, proporcionan potencia reactiva, esencial para el correcto funcionamiento de dispositivos eléctricos y la estabilidad del voltaje. Incluso si se vende toda la electricidad generada, las baterías pueden ofrecer servicios valiosos a la red.